El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha designado a 14 juzgados de lo mercantil de Madrid, Cataluña y Valencia para atribuirles en exclusiva los asuntos de propiedad industrial que puedan sugir al amparo de las leyes de patentes, marcas y protección jurídica del diseño industrial.
Así lo refleja el acuerdo de 21 de diciembre de 2016 de la Comisión Permanente del CGPJ. En este sentido, todos los asuntos civiles que tengan que ver con la Ley 24/2015, de 24 de julio, de Patentes, de la Ley 17/2001, de 7 de diciembre, de Marcas, y de la Ley 20/2003, de 7 de julio, de Protección Jurídica del Diseño Industrial, deberán juzgarse ante estas sedes judiciales.
En concreto, los juzgados de lo mercantil números 1, 4 y 5 de Barcelona se encargaran de los casos de patente y diseño industrial. Por su parte, los juzgados de lo mercantil números 2, 6, 8 y 9 de Barcelona llevarán los temas relacionados con las marcas.
Por otro lado, la responsabilidad también cae en los juzgados de lo mercantil números 7, 8, 9 y 10 de Madrid. Además, el número 2 de Valencia es el designado para llevar las patentes. Por su lado, al 1 y 3 de Valencia se les atribuirán los asuntos de marcas y diseño industrial.
Todo ello sin perjuicio de las normas de reparto que se aprueben entre los distintos juzgados de lo Mercantil, para el supuesto de que sean varios los juzgados de esa clase que en la misma ciudad que asuman el conocimiento de esa materia y de la compensación en el reparto de asuntos que procediera efectuar, respecto de aquellos juzgados que no asuman dicha materia, según recoge el acuerdo del Poder Judicial. Esta medida entrará en funcionamiento y producirá efectos a partir del 1 de abril de 2017.
Un sector al alza
Los sectores intensivos en derechos de propiedad intelectual (DPI) aportan a la economía de la Unión Europea (UE) uno de cada tres empleos y más del 40 por ciento del PIB. Así lo determina un informe elaborado por la Oficina de la Propiedad Intelectual de la UE (Euipo) y la Oficina Europea de Patentes (OEP), que analiza el impacto de las empresas de este ámbito durante el periodo 2011-2013. El informe -el segundo de este tipo; el anterior analizó el periodo 2008-2010- también certifica que las empresas dedicadas a estos sectores resistieron mejor los embates de la crisis económica.
Además, la Unión Europea se ha sumado a la tendencia anglosajona y ha regulado, por primera vez, la protección de secretos comerciales. La normativa, una vez transpuesta al ordenamiento español, permitirá a las empresas litigar, con mayor seguridad jurí- dica, cuando sean víctimas de un robo -o filtrado- de información hacia sus competidores acerca de sus procedimientos confidenciales.
Fuente: elEconomista