Las grandes empresas afrontan estos meses el reto tecnológico que supone adaptarse al nuevo sistema de suministro inmediato de información (SII) del IVA, que desde el 1 de julio revolucionará la forma en que reportan sus facturas a la Agencia Tributaria (AEAT).
El SII, que está pendiente de desarrollo en una orden ministerial, cambiará el actual sistema de llevar los libros de IVA, ya que esas empresas estarán obligadas a remitir una gran cantidad de información de cada factura emitida o recibida en un formato específico y en un plazo máximo de cuatro días, que este año se amplía excepcionalmente a ocho.
Las empresas obligadas al nuevo sistema SII desde el 1 de julio, son las compañías con más de 6 millones de euros de facturación al año, grupos a efectos de IVA y las acogidas al régimen de devolución mensual (Redeme), aunque para estas últimas se ha abierto un periodo de renuncia.